Desgastes

¿Qué es?

Puede ser síntoma de diferentes problemas en función de la velocidad con la que se produce.

¿Qué significa?

La pérdida de sustancia puede ser la antesala de una enfermedad dental. Para determinarla es importante atender a cómo y a qué velocidad se está produciendo esa pérdida:

Muy rápido: Un diente puede perderse de manera inmediata si se produce un traumatismo, es decir, un golpe que incide sobre el diente y hace que se parta y por tanto se pierda la pieza o una parte de ella.

Más lento: La caries es una enfermedad bacteriana sobre una lesión química previa de la superficie del diente que produce un reblandecimiento de la estructura dentaria que provoca que la pieza se vaya perdiendo. El paciente es consciente de que padece la caries en un estadio tardío de la enfermedad, pues lo nota cuando el diente rompe por la debilidad estructural que la caries le ha producido.

Muy lento: Los desgastes pueden producirse por bruxismo (movimiento de la boca realizado de forma inconsciente), por productos químicos (ácidos de limones, refrescos con burbujas…) o por el paso del tiempo (personas mayores).

¿Qué debo hacer?

Las pérdidas de sustancia se deben tratar, pero como la solución también implica conseguir una buena función masticatoria, es necesario realizar ajustes en la mayoría de los dientes para que el tratamiento sea efectivo.

Las pérdidas de sustancia por traumatismo y/o por caries se pueden reparar con un material llamado composite que se adhiere al diente residual. En algunos casos de traumatismo, el paciente conserva el trozo de diente roto y somos capaces de reponerlo en su sitio nuevamente, siempre que la rotura haya sido limpia y en trozos los suficientemente grandes. La restitución estéticamente es perfecta a también a nivel funcional.